Llegamos al punto final de un largo proceso.
Con la publicación de las notas del ejercicio de psicotécnicos con el que se remata la tercera prueba del proceso selectivo para escala básica, los aspirantes agraciados con el apto definitivo ven su sueño, al fin, hecho realidad.
Han sido muchos meses, años en algunos casos, los invertidos por estas chicas y por estos chicos. Meses de esfuerzo, de sinsabores, de malos momentos, de sufrimiento, de incertidumbre, de incomprensión, de dudas existenciales… Pero también meses de compañerismo, de amistad, de solidaridad, de puesta en común de los mismos intereses, de las mismas aspiraciones…
Un año más, nos despedimos de ellos celebrando su éxito y brindando por su futuro. Compartiendo risas, anécdotas, comentarios, planes…
Y son sentimientos encontrados, es verdad. Te produce una cierta nostalgia saber que vas a dejar de ver cada semana las caras que has estado viendo, casi como una costumbre, durante tantas y tantas clases. Es mucho el aprecio que se coge a estas personas, con las que se convive muchas horas y con las que se establece un vínculo muy especial.
Pero, por encima de esa ‘cierta nostalgia’, prevalece el orgullo, la alegría compartida, la satisfacción de haber alcanzado una meta común. Sin esto, nuestra actividad carecería de sentido. El futuro es de los opositores, pero el objetivo y el empeño son comunes. Y, por qué no decirlo, la alegría y la risa incontenida, también.
Durante la celebración, ¡¡qué rato tan bueno!!, vas hablando con unos y otros, vas escuchando sus carcajadas, vas viendo el brillo de sus ojos y las ganas de comerse el mundo que todos ellos demuestran y sienten y eso compensa cualquier cosa.
Y es algo que quiero compartir con todos: con los que antes, como sus compañeros, pasaron por este mismo trance (a todos, un fuerte abrazo); con los que estáis en la actualidad peleando por llegar (ved hasta qué punto compensa vuestro esfuerzo, por lejos que podáis sentir que se encuentra ese final); con todos los colaboradores que habéis ido poniendo vuestro granito de arena, en mayor o menor medida, sin cuyo esfuerzo habría resultado imposible…
Y llegando al final, la sorpresa… A las muestras de cariño que tanto nos ayudan a continuar cada día, se añadió la entrega de una placa conmemorativa del aprobado de los integrantes de esta promoción. Igual que quienes les precedieron, el hecho de tomarse la molestia (con todo lo que conlleva…) en hacernos entrega de una placa con sus nombres, dice mucho. Es un gran gesto que agradecemos enormemente, de verdad, por todo lo que implica: “Gracias por guiarnos en nuestro sueño”, reza la placa… No, gracias a vosotros por hacernos partícipes de ese sueño, con nuestra modesta aportación. Ha sido un orgullo y una alegría haber contribuido mínimamente a que consigáis ese gran logro, un logro que solo es mérito vuestro, pues solo vuestro esfuerzo os ha abierto la puerta de acceso a la institución a la que todos aspirabais a pertenecer.
En el silencio de la academia vacía, releía con una sonrisa los nombres de todos los protagonistas, reviviendo distintos momentos de cada uno… Y cuando llegaba al final de la placa, me detenía en la última frase de la misma: III PROMOCIÓN E. BÁSICA…
Son casi tres años los que llevamos funcionando como academia de preparación de oposiciones. Cerca de tres años en los que todo el equipo nos estamos empleando a fondo, intentando mejorar cada día, haciendo lo imposible por dar la talla, por cumplir lo que esperan los opositores de nosotros. Con nuestros múltiples defectos, con los numerosos fallos que seguimos cometiendo, con nuestras limitaciones… Pero con la misma ilusión que el primer día, con las mismas ganas de llevar a buen puerto el objetivo de cada uno de los que entra por la puerta.
Y, por momentos, parece que llevemos aquí, en Vallecas, toda la vida. Pero, en otras ocasiones, parece que fuera ayer cuando inauguramos el local, con la ilusión de un adolescente en puertas de su primer concierto.
Tres promociones enteras han pasado por nuestras aulas. Tres grupos a cuál mejor. Pero sobre todo, tres colectivos formados por grandes personas, cada uno con sus nombres, con sus circunstancias y con sus peculiaridades. Grandes personas de las que nos seguimos acordando cada día que paseamos por las clases y vemos sus nombres en esas placas tan bonitas como simbólicas.
Parece mentira, pero así es…
¡Qué orgullo sentimos por todos vosotros!
P. D. Hoy ha tocado hablar de básica… Otro día hablaremos de nuestros inspectores…
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